Colonias de Gatos
Viven entre las rocas, las trabes o lugares abandonados, son otros mundos consecuencia del abandono y la indiferencia humana. Los gatos ferales no tienen interacción con los humanos, sin embargo, dependen de ellos para sobrevivir, porque la vida en la calle es sobrevivencia.
Un gato feral nos observa a la distancia, él vive en una colonia que cuidan nuestros compañeros de AzcaPulguitas.
Es complicado dar una cifra exacta sobre la población de gatos ferales en el mundo, en el año 2018 de acuerdo con Ecology Global Network se estimaba una población mundial de más de 100 millones, actualmente conforme algunas investigadores se estima una población de entre 200 millones y 600 millones de individuos tomando en cuenta a gatos que son miembros de una familia, gatos que sobreviven la calle y gatos ferales.
La calle no es un lugar para vivir, la calle se sobrevive.
A diferencia de lo que se cree, los gatos no son animales independientes con vidas satisfactorias. Los gatos padecen la calle, abandono, hambre, indiferencia, enfermedades, violencia, son atacados y muertos por otros animales, son considerados plaga lo cual los condena al exterminio.
Negrito se acerca sigilosamente, va por su sobre de alimento.
Velar una colonia de gatos no es tarea sencilla. Personas humanas se organizan para proporcionarles lo necesario procurando sean satisfechos sus intereses básicos y mejoren sus condiciones de vida. Desde su alimentación, limpieza de contenedores de comida y agua, sus necesidades médicas, hasta llevar a cabo TNR (Trap|Neuter|Return • Captura|Esteriliza|Libera).
Nut y Patricio llevan alimento y agua a los contenedores para cubrir las necesidades básicas de los gatos de AzcaPulguitas.
Tuve la oportunidad de acompañar a mis compañeros de AzcaPulguitas, quienes asisten a varias colonias de gatos, su trabajo es incansable. Aportan sus recursos económicos, a la semana invierten tan sólo en 45 kilogramos de alimento y 80 litros de agua, más aún las esterilizaciones, las vacunas, las desparasitaciones y la atención médica de ser necesaria. Además de su tiempo, su esfuerzo, sus conocimientos y paciencia para concienciar sobre el respeto hacia los gatos que cuidan y protegen.
July limpia los baldes de agua.
Un gato feral nos observa a la distancia, él vive en la colonia que cuida AzcaPulguitas.
La calle es sobrevivencia.
Los gatos no son animales independientes con vidas satisfactorias.
Nut coloca un balde de agua potable.
Laura y Chewi son los mejores amigos.
Este mundo también les pertenece a los demás animales.
«El abandono por parte de una sociedad que les discrimina». — AzcaPulguitas.
De acuerdo con Ecology Global Network en el mundo se estima una población de gatos ferales de más de 100 millones.
Los gatos dependen de los humanos para sobrevivir.
A la semana se requieren tan sólo 45 kilogramos de alimento y 80 litros de agua.
Güero.
Esperando la comida y el agua.
«Oponerse al especismo nos debería llevar inevitablemente a movernos y hacer algo para cambiar las cosas para los animales no humanos». — AzcaPulguitas.
Conejo.
Todos necesitamos cariño y cuidados, independientemente la especie a la que pertenezcamos.
Gracias mis queridos compañeros por su solidaridad y fortaleza.
Sofía Dumat|CLAMOR DE LIBERTAD